Es la primera vez que las hago, y la verdad es que me han encantado. Quedan muy suaves y riquisimas.
Yo las hice pequeñas, así sirven para aperitivo. Las hice días antes y las congele.
Necesitaremos:
250gr de gambas
200 de leche
200 de fumet
4 cucharadas soperas de harina
8 cucharadas de aceite
sal
nuez moscada
Para el rebozado:
pan rallado
huevo
harina
Yo he usado gambas de las pequeñas, de esas que se llaman arroceras, pero que dan mucho sabor.
Las he pelado y con las cascaras y las cabezas, he hecho el fumet.
En una cazuela, calentaremos el aceite y freiremos las gambas, reservaremos. Añadiremos la harina y rehogaremos para que no sepa a cruda. Añadiremos poco a poco el fumet y la leche junto con la sal y la nuez moscada. Añadimos las gambas y mezclaremos bien hasta conseguir una bechamel espesita. Pensar en no dejarla demasiado espesa, ya que cuando enfría espesa. Para mi gusto, las croquetas tienen que ser finas y suaves.
Yo pongo la masa a reposar dentro de una manga pastelera deshechable. De esta manera me salen todas iguales.
Una vez fría la masa y con la ayuda de la manga, hago churros encima de una bandeja con harina. Corto a la medida que me interese y las muevo para que queden rebozadas. Pasamos por huevo y rebozamos en pan rallado. En este caso he usado con ajo y perejil, ya que les va muy bien.
Y ahora solo queda freirlas. Recordar, aceite bien caliente y un pocas en cada tanda.
Si no disponéis de manga pastelera, pues las hacéis como toda la vida, y bien buenas.
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